Miercolesmontana: 2022-01-05 Laguna de Pitillas desde Murillo el Cuende (Murillete)

Asistentes: Bixen, José Luis, Joxe, Miguel, Patxi, Pedro y Txutxo.

Total (7)

Primera excursión del calendario del año 2.022, preparado con la puntualidad y la precisión propia del "César" del grupo.

Empezamos la excursión desde Murillo el Cuende, Murillete, municipio que lo forman junto con Rada y Traibuenas.

A esas horas el pueblo estaba tranquilo, sólo nosotros y un jubilado que iba a sus labores hortelanas, nos dio un consejo para no pasar frío, que no nos faltase la bota, pero la de beber.

Nos desviamos un poco del camino para visitar la ermita de la Santa Cruz. Un lugar con mucha historia, construida sobre restos prerromanos.

En el valle del Cidacos, en esta zona, ya habitaban en la Edad del Hierro, siglos VIII al III a.c.

De la época romana se encontraron restos al hacer las obras del Canal de Navarra en 2.011, en la villa de los Olmos. Luego la poblaron los suevos, vándalos y alanos. Los visigodos mantuvieron durante 300 años continuos enfrentamientos con los vascones. En el 711 llegaron los árabes, que conquistaron Pamplona en el 738 y se instalaron en Tudela hasta 1.119. En 1.092 aparece la primera referencia escrita de Murello Comitis.

En tiempos de Sancho el Fuerte se construye la iglesia románica, y en torno a 1.200, la actual ermita constituye la cabecera de la iglesia.

Una vez vista la ermita por fuera, está cerrada con llave y no pudimos entrar, comenzamos la excursión.

Por camino ancho y pista nos dirigimos al cabezo de Altarasa, desde el que vemos todo el valle del Cidacos y la laguna de Pitillas, algunos vieron más al subirse al elevado punto geodésico. Esto fue lo único ascendente de la excursión, era para caderas frágiles.

Descendimos por la pista hasta llegar al centro de interpretación de la Laguna. Allí almorzamos, esta vez no había Alta cocina gallega de Mendavia, pero sí, ricas magras con tomate de ¿Mendavia? o ¿Zemborain? regadas con una buena mezcla de vinos, turrón, duro y blando.

Como teníamos tiempo de sobra, bordeamos un buen tramo de la

Laguna para ver unos pocos cisnes y patos despistados.

Volvimos para coger el camino de vuelta a Murillete. También por pista. Sin turruncales, un paseo cómodo.

Había que terminar con las cervezas de rigor. No pudo ser en el Hostal Tafalla y nos fuimos hasta el Albero, croquetas, rabas y cañas.

Todos para casa, con un bonita excursión, diferente, bien elegida, como siempre.

Datos:

Distancia: 13,2 km.

Desnivel: 152 m.

Tiempo total: 3 h 43'

Tiempo parados: 47'