Asistentes: Jesús, Joxe, Miguel, Patxi, Pedro y Txutxo. Total (6)
Hoy salimos desde el parking del Parrizal.
Desde aquí sale un recorrido preparado con pasarelas aéreas, muy seguras, sobre el río Matarranya, por el llamado "Estret de la Fenellosa". Un recorrido muy visitado. Hoy como era lunes había poca gente, nosotros hemos llegado los primeros, antes que el guarda que cobra el acceso. Pero le hemos dado doble trabajo, nos cobraba la tarifa normal y le hemos recomendado que nos cobrase la de federados, más barata, faltaría más!!!!
El tramo del estret es espectacular, un cañón de rocas de unos 50 m. de altas, por el que baja el río, hoy con poca agua, el final estaba seco.
Al terminar el recorrido preparado tuvimos que seguir el cauce del río seco. Bastante pedregoso sin tramos de ascenso.
Fuimos siguiendo el track, pero hubo un momento que el río nos obligaba a descalzarnos para poder avanzar, y no veíamos otra opción. Cuando parecía que la mejor opción era avanzar descalzos por el río, y dos ya se había quitado botas y hasta el pantalón, el resto del grupo encontró un camino que salvaba ese tramo de una manera más cómoda. Así que los descalzos llegaron bastante más tarde al lugar que salía el camino. Nos juntamos todos. Pero hoy teníamos un track hecho con cartabón y en otro momento que no estaba claro como seguir por el río, una parte del grupo quiso seguir el track y se metió en un auténtico lío, por ahí no había camino claro y fuimos subiendo alejándonos del cauce río hasta llegar a una zona que era imposible volver a bajar al río. Más vale que los dueños de los GPS buenos nos orientaron para volver al lugar que ellos habían llegado siguiendo por fuera del cauce.
Todos juntos paramos para almorzar la fruta que tocaba. Desde aquí el camino fue más claro y cómodo alejándonos del río.
Llegó la hora de comer en un claro del bosque cerca de una zona que tenía ruinas de varias edificaciones, parecía que esa zona estuvo habitada, sólo quedaba de recuerdo una pequeña construcción de piedra que en el mapa llamaban "pozo", un espacio de forma cónica, pequeño, justo cabría una persona si esta conseguía pasar por la puerta que tenía.
Hoy tocaba magras con tomate y su gordo correspondiente. Muy ricas y para postre unas pastas típicas llamadas "casquetas" rellenas de calabaza, cabello de angel, y chocolate, estas últimas debían dejar la boca sin saliva.
Desde aquí el descenso, con continuas amenazas de lluvia, los rugidos de los truenos iban y venían, nos acordamos de algún ausente. Aceleramos el paso para llegar antes de que descargase la tormenta. Tuvimos suerte, empezó una lluvia suave llegando al parking. Nos fuimos de allí rápido para mojarnos de una manera más agradable, en la piscina del pueblo.
Aquí nos mojamos con agua por fuera y con cerveza por dentro.
Una excursión larga pero muy interesante. El paisaje de los Moletes era muy llamativo y nuestros despistes también.
Datos:
Distancia: 18 km.
Desnivel: 760 m.
Tiempo total: 7 h 4'
Tiempo parados: 2 h 4'
Desde 631m.
El agua turquesa invitaba al baño |
Al avanzar el caudal de agua disminuía |
En algunas pozas se podía ver algunos peces pequeños |
Los pasos más elevados salvaban tramos difíciles |
El cañón se iba estrechando |
Fuera del cauce el bosque era muy espeso |
Esta zona estuvo habitada, pero sólo quedaba este pozo |
Aquí comimos, pero no nos fiamos del pozo y seguimos tirando de bota de vino |
En los Moletes había esta foradada, con vistas al valle |
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Esto es lo que se veía mirando al cielo en el Estret de Fenellosa, una enorme pared rocosa |
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